Hace nada os contaba cual era el reto de este mes en nuestro club de cocina: "El Club del Tupper" y ya estoy aquí para contaros que tal nos ha ido con los
La verdad es que me he dado cuenta que la cocina nos retrata tal y cómo somos, o al menos tal y como yo percibo a mis nuevas amigas.
María es inquieta, siempre con nuevas ideas en la cabeza, a cada cual más imaginativa.
Esta vez decidió hacer honor al nombre completo del Club y mientras ella cocinaba los muffins, su pequeño Nico se dedicaba a hacer ratoncitos de fieltro.
Tanto los ratones como los muffins quedaron estupendos.
Me encanta como los presentó a la mesa. Vestidos de fiesta como las que prepara con Pistacho.
Lucía, como súper mamá que es, es organizada y práctica.
Utilizó a Maruja, su thermo, para que le echara una mano.
Y aunque los presentó como una profesional, no consiguió convencer a los peques para que los prefirieran a los de chocolate.
Eso sí, no sé cómo lo hace, pero consigue tiempo para hacer miles de cosas, entre ellas montar una alternativa diferente para la gente gallega: Ví luz y entré.
Angie lleva el diseño y la creatividad en la sangre.
No puede evitar innovar todo lo que cae en sus manos, ya sea una invitación de boda, un poster o una imagen corporativa.
Como no podía ser menos, trató de innovar cambiando el puerro de la receta por jamón serrano y consiguió unos muffins la mar de salados.
Como es una tía muy valiente y quiere ayudarnos a afrontar con alegría la operación biquini, ya ha decidido el 5º reto: Coulant de Chocolate Blanco.
Bea es el colmo del buen gusto.
No sólo por cómo explicó el paso a paso, con esas fotos que casi ni necesitaban texto, sino por el picnic que organizó en casa.
Martina estaba pachucha y yo les había metido el gusanillo del picnic, así que ella enseguida buscó la solución al problema.
La mesa es una caja de frutas recuperada. ¿No es una auténtica monada?
Y no os perdáis cómo preparó algunos de los muffins para regalo. Ya sabéis, el continente es tan importante como el contenido.
Paula es una loca de las fiestas handmade y de las manualidades.
No sólo cocinó unos estupendos muffins, sino que montó una súper fiesta improvisada en el jardín
y nos enseñó como preparar un servilletero de los más original.
Esas son las fiestas que me gustan a mí. Improvisadas, pero con todos los detalles que las vuelven inolvidables.
Marta es una explosión de gracia, buen rollo y mucho gusto. Todo junto y revuelto, como agitado en coctelera. Siempre que la leo termino entre la amplia sonrisa y la sonora carcajada.
Esta vez cocinó y fotografió los muffins perfectos.
sólo que con los ingredientes equivocados.
Merece la pena leer las razones de su puño y letra. Yo sólo os adelanto su sabor, copiando textualmente sus palabras: "como meter la lengua en una cazuela de aspirinas al baño María"
Begoña es de esas personas que sorprenden cada día un poquito más. Ella cree que es pequeñita, pero la realidad es que es grande, grande.
Su fotografía es increíble
pero todo lo que hace y lo que se inventa hacen que cada día la admire más y más.
Esta vez nos mostró su vena gamberra, con todo un equipo de mantenimiento y limpieza que contrató para sacar brillo y esplendor a sus muffins.
Y por supuesto, como siempre, nos recomendó una música estupenda.
Begoña, soy tu fan.
Lila and Cloe es uno de esos descubrimientos que tengo que agradecerle a este club. Siempre mostrando cosas bellas, sorprendiendo con sus recomendaciones y con su corazón tan inmenso.
Preparó los muffins en moldes multicolores.
y además los coronó con algo de bacon y cambió la miel por algo de caramelo. ¡Imaginación al poder!
Además los presentó de una forma muy original. La casita y el huevo los hizo su peque en un taller para niños organizado por Terrón de Azúcar.
Aunque a Rebeca no la conozco personalmente, me la imagino como una persona tremendamente elegante y con mucho, mucho gusto.
Con los muffins ha descubierto que le gusta cocinar en compañía, así que cualquier día nos presentamos todas en su cocina para preparar una receta. (Aunque me temo que hablaríamos como cotorras y terminaríamos pidiendo algo a domicilio).
Ella también se atrevió con un picnic de tarde. ¿No os parece una pasada?
Terrón de Azúcar
La que nos falto este mes fue Isthar. Ha estado muy liada disfrutando de la familia e impartiendo un montón de cursos.
Leer su blog todo este tiempo ha sido una mezcla de envidia de la sana y de inspiración de la buena. ¡Qué cantidad de cosas bonitas!
De nosotros no os voy a contar nada porque lo habéis visto ya, pero si estos días festivos os atrevéis con un picnic, aquí os dejo la receta.